martes, 19 de noviembre de 2013

Endulzando el final de Breaking Bad

No sé si este vídeo es oficial y, por tanto, este es un final alternativo oficial y no un montaje que ha hecho alguna persona. Acabo de verlo y, ya que os hablé tanto en otras ocasiones sobre el final de la serie, ¿por qué no comentar esto también? Lo primero de todo, os dejo el vídeo para que lo veais. ATENCIÓN: SPOILER!!! Si no habéis terminado de ver la serie o no la habéis visto, ni se os ocurra seguir leyendo.




Como habréis podido comprobar, es exactamente el mismo final que se emitió por televisión con unos segundos más de añadido justo al final.Walter White muere en el laboratorio, tirado en el suelo, mientras suena una canción que reza "tengo lo que me merezco". Poco después la policía entra en el lugar y registra la zona. Fundido a negro. Y ahí nos empezaron a salir las letras de créditos tras un segundo que se me antojó eterno, cosas del suspense del momento. Pero en este vídeo ese fundido a negro no nos lleva a los créditos, sino que empezamos a oir un sonido, las confusas palabras de alguien dirigiéndose a otra persona. Y otro segundo después estamos en la consulta del médico, viendo a un Walter ensimismado, pensando en otras cosas mientras el médico le comunica que tiene cáncer. Bueno, en realidad no está pensando en otras cosas, sino en todo en lo que se ha convertido en la pantalla y de lo que hemos sido testigos. Vamos, como si toda la historia de Heisenberg no fuera más que un producto de su imaginación. Y aquí es cuando, por mucho que me pese, he de decir que el final emitido fue el más idóneo y acertado. 

El recurso de "ha sido todo un sueño" (en este caso una ensoñación, un pensamiento en un momento en el que uno se abstrae, olvida el mundo y se mete en su cabeza) no me termina de gustar. Me parece aliviar las cosas, disfrazar lo malo y hacerte pensar que no ha pasado nada para que no te preocupes. Es como la mentira piadosa que les contamos a los niños para que no tengan miedo. Pero en una serie como esta hay que echarle un par y darse cuenta de que comportarse de cierta manera tiene sus consecuencias, que la cosa no va a acabar bien del todo. Hay quienes piensan que Walter podía haber vivido y pasar el resto de su vida en la cárcel. Por un lado esa me parece una consecuencia lógica de sus actos, le han pillado, pero recordad que el cáncer estaba en un estado bastante avanzado, iba a morir de todas maneras. ¿Qué mejor que morir de forma tan poética? En su laboratorio, aquel que le devolvió la vida.

Volviendo al recurso de "nada de esto ha ocurrido de verdad", éste no me parece valiente. Sí es impactante, de hecho como vídeo me ha gustado porque me ha sorprendido, pero no es un final consecuente. ¡Por favor! ¡Si tenemos en España el mejor ejemplo de final de este tipo, el famoso "sueño de Resines" de Los Serrano! Con aquello nos suavizaron el suicidio del personaje de Resines, ¿de verdad queréis eso para una serie como Breaking Bad? Aunque nos duela, ambos personajes que acabo de mencionar murieron, cada cual de forma más trágica, pero la serie acabó con esa pizca de tristeza y pesar. Breaking Bad acabó con Walter tendido en el suelo en el centro de nuestras pantallas. Si llego a ver esa alternativa escena añadida creo que me habría cabreado un poco en ese momento. Estaba asumiendo la muerte de Heisenberg y su alter ego Walter White (que no al revés), no quería caramelos que me endulzaran la amargura. Punto y final.

En fin, no me enrollo más. ¿Opináis como yo? Contadme cosas :)


PD: circula otro vídeo a modo de sketch con un "final alternativo" de la serie en el que vemos a Cranston encarnando de nuevo al padre de Malcolm en la serie del mismo nombre. Una escena graciosa. Lo podéis ver aquí, de donde he sacado la info para este post :)


domingo, 17 de noviembre de 2013

Huele a Navidad... a mediados de noviembre



Aunque estemos a mediados de noviembre, ya estoy empezando a oler a Navidad. Igual es que no paro de tararear mentalmente la cancioncilla del anuncio de la Lotería ...y ¡qué anuncio! lo que nos estamos pudiendo reir... El caso es que ya se nota en el ambiente que las vacaciones están prácticamente a la vuelta de la esquina. Reuniones familiares, reencuentros con amigos que están lejos, calles iluminadas, alegría en la cara de las personas... Tengo muchas ganas de todo eso. Y, como todos los años, tengo muchas ganas de mi particular calendario de adviento bloggero. Aunque no actualice mucho el blog, sí que escribo cosas a diario y este año voy a obligarme a mí misma a dejaros un escrito o relato todos los días, del 1 al 25 de diciembre. Me gustaría que todos los días tuviérais cosas como estas, posts que me curré un poquito más:


En fin, nada más por ahora. Sólo quería asomar la patita, que hace días que no lo hago, y deciros que el mes que viene me lo voy a currar, aunque luego no me lea nadie jajajaja Pero me gusta escribir y quiero hacerlo, por mí.

Nos vemos!

PD. Ya que lo he mencionado, os dejo con unas parodias del anuncio de la Lotería con las que me troncho jajaja


jueves, 7 de noviembre de 2013

Setas envenenadas

Setas envenenadas, que no venenosas. Unas setas en apariencia graciosas, coloridas, divertidas, que animan el lugar. Todo eso no lo vamos a poner en duda. Las setas de la calle San Francisco alegran la calle. Ahora bien, ¿eran necesarias? o, mejor dicho, ¿era necesaria la inversión de tantísimo dinero público en unos elementos decorativos de este tipo? ¿A nuestra alcaldesa se le ha ido la pinza o no? Pues sintiéndolo mucho, soy de la opinión de que si se quería revitalizar una zona de nuestra ciudad, había otras muchas alternativas y muchísimo más económicas para llevar a cabo esa misión. Y es que si uno se pasea por la calle San Francisco, descubrirá que una de las calles que la cruzan, la calle Golfin, tiene sendos poemas (no recuerdo quién era el autor) escritos en las fachadas de los edificios. Y si uno atraviesa esa calle llegará a otra, paralela a la rebautizada "calle de las setas", en la que se encontrará un Rincón del Poeta, donde alguien ha pintado como hojas de cuaderno para que quienes por allí pasen escriban sus poemas en las paredes. Os dejo más abajo las fotos para que lo veáis mejor. Para mí, esa iniciativa poética me parece sencilla, barata y viste mucho la calle. No hace falta despilfarrar una cantidad que no nos podemos permitir para hacer lo que creo que es un capricho, con el encargo de turno a un conocido, ya sabéis, ese tipo de favores que se lleva nuestra querida Castedo con los caciques de nuestra ciudad. En fin, el menú de setas que nos ha servido nuestra alcaldesa nos está causando indigestión. Alegran la calle, sí, pero son prescindibles totalmente. Y sírvase mi querida Sonia del ejemplo que le acabo de dar. No siempre lo más caro es lo más acertado. Vaya a pasearse usted por las calles que le he mencionado y vea lo que le digo.

Y para más señas, he aquí las fotos:



miércoles, 6 de noviembre de 2013

No me toques las Erasmus y la tele que me conozco...


...o "sin tele y sin Erasmus, Miri pierde la cabeza". 

No me ha gustado nunca hablar de política. Cuando era pequeña lo veía un tema de mayores, algo aburrido y de lo que apartarme. Pero todo llega, igual que cuando de pequeño te mojas los labios con el vino o la cerveza de tu padre y juras no beber nunca nada alcohólico porque sabe a rayos. ¡Bendita inocencia! ¡Y qué efímera es! Sin darnos cuenta, la realidad nos golpea y somos personas más conscientes de lo que nos rodea. A mí la política ya ha dejado de darme igual. No puede seguir dándome igual cuando pasan tantas cosas y tan injustas a mi alrededor, algunas incluso me afectan directamente. 

Como casi siempre que acabo escribiendo sobre política en este blog, algo me ha impulsado a hacerlo. En este caso, llevamos una semana que tiene tela. Dos son las cosas que quisiera destacar aquí, porque de alguna manera me tocan lo que es mío. La primera es ese casi circo que ha montado el ministro Wert a propósito de las becas Erasmus; la segunda, el cierre de nuestra televisión pública valenciana. Son dos cosas aparentemente diferentes, pero en esencia iguales. Ambas se cogen de la mano porque afectan al ciudadano de a pie, al trabajador, al estudiante, a quien más sufre con esas decisiones que toman los de arriba en aras de lo que ellos consideran un bien común: recortar de un sitio para beneficiar otros sectores más desfavorecidos. Eso suena bonito, pero la realidad y la práctica son otra cosa totalmente diferente. No nos ponemos todos el cinturón, nos lo atan a nosotros al cuello y ellos siguen con el cinturón desabrochado de tanto que se llenan la barriga o, en este caso, los bolsillos de dinero. No hay justicia por ningún lado, luego el planteamiento inicial no es válido y protestamos.

En el caso de las becas Erasmus, han querido pisotear aun más a los estudiantes y esta vez les ha salido el tiro por la culata al haber aplicado esa medida con los alumnos que ya se encontraban realizando estudios en otras universidades europeas en este curso vigente. El recorte y las nuevas medidas estarán el curso próximo a menos que pongamos remedio antes. De momento se ha conseguido salvar el tremendo sinsentido que iba a acaecer sobre los Erasmus de este año. Una pequeña batalla ganada, pero falta mucho por ganar esta guerra que ha empezado este gobierno de fascistas enmascarados contra la Educación, contra lo que nos forma como personas y ciudadanos de bien. A mí, como parte del sistema educativo, me han fastidiado a base de bien; soy una profesora que no ejerce como tal en la Escuela Pública. Pero ya tocarme las Erasmus habiendo sido yo una beneficiara de esa beca hace años, es tocarme la fibra sensible. A mí esa experiencia me cambió y mucho, mi vida no sería la misma y le estaré eternamente agradecida al programa Erasmus por todo lo que me ha dado. No puedo soportar que le nieguen ese derecho a otros jóvenes.Y como yo, otros ex-Erasmus piensan igual. No saben con quién han ido a meterse...

Por otro lado, mi indignación crece esta semana cuando el buen sabor de boca por haber conseguido los trabajadores despedidos con el ERE de RTVV que el juez declarara ilegales esos despidos ha sido tan efímero. Horas después del fallo judicial, salía nuestro presidente valenciano a comunicar el cierre de la televisión pública valenciana. ¿Dónde queda la dignidad del trabajador? ¿Dónde queda el respeto por aquellos que se ganan día a día con su esfuerzo el pan que llevarán a sus casas? Desde hace años Canal Nou daba asco porque quienes no debían se metieron a mangonear, a utilizar la televisión con fines políticos, a llenarse los bolsillos de pasta a costa de los demás. Ahora han dejado un agujero insalvable. Entiendo que no tengan dinero para pagar y entren en bancarrota, pero es algo muy fuerte y no veo que nadie pague las consecuencias de sus actos, tan sólo van a pagar el pato quienes menos culpa tienen. Cierran y lo hacen en lo que considero un acto de rebeldía. Sí, por si no fuera bastante lo que han hecho, todavía se hacen las víctimas. Quiero ver las cabezas de los (ir)responsables de todo esto, quiero que paguen por lo que han hecho, quiero ver dimisiones por haber hecho mal el trabajo. Pero, o mucho cambian las cosas, o no vamos a ver nada de esto. Estamos en la Comunidad Valenciana, aquí los déspotas tienen vía libre para hacer lo que les dé la gana. Luego todos a ver las mascletàs en primera fila, que aquí no pasa nada. Y si hay que sonreir en las fotos, "dientes dientes, que eso es lo que les jode". Mira por dónde, ahora ya no van a salir más en la tele. No hay tele.

En fin, me apetecía desahogarme un poco. Este post no va a ningún sitio, pero me he quedado muy a gusto.

¡Hasta la próxima!