¿Qué tendrá el viento?

Anoche me terminé de leer El nombre del viento de Patrick  RothFuss, un libro que me ha tenido atrapada desde la semana pasada. Hoy vengo dispuesta a conseguir que alguno de vosotros caiga en sus garras como yo, pues no se arrepentirá. Cuando una historia es buena y está bien contada, merece la pena acercarse a ella y formar parte de la misma. Porque sí, yo ya camino junto a Kvothe, su protagonista, y me siento parte de esta historia.

Poco puedo contaros acerca de qué va el libro, pues os fastidiaría las dudas que os irían surgiendo en la lectura de si el personaje consigue o no lo que se propone. Así pues, tan sólo os diré que se trata de la crónica de cómo el que ahora es un simple tabernero entristecido escondiendo su verdadera identidad, se convirtió en un personaje de leyenda. Pero no un héroe legendario cualquiera, sino alguien fuera de serie, increible, que domina la magia, la música, alguien de quien todo el mundo habla cada dos por tres. Poco se imaginan los clientes de la taberna lo cerca que tienen a su héroe. Pero, como he dicho antes, ahora no es quien solía ser. Kote, como ahora se hace llamar, es una persona triste, ni la sombra de lo que fue. Hasta que un día aparece por la taberna un escribano y cronista y le propone contar su historia. Así pues, Kote contará la historia de Kvothe desde el principio, con todo lujo de detalles. Y os lo prometo, es una gran narración, de esas que no puedes parar de leer. La curiosidad por saber cómo ha llegado a su situación actual, o cómo logró convertirse en leyenda, o qué es lo que hizo que ahora tanto teme, hacen que no pares de leer. Además, el trato que se le da a lo que comunmente conocemos como Magia, es algo innovador, diferente. Por no hablar de cómo se nos describe la música y la poesía como algo vital y necesario, como parte fundamental del individuo. Te hace admirar la belleza que hay en ellas....Y hasta aquí os puedo contar. Mi resumen no es gran cosa, ya os he dicho que no puedo decir lo más mínimo porque si no os daría pistas. Así que mejor os transmito mi sensación al leerlo, algo que si cuento bien os hará ir derechos a leer el libro.

Pocas veces un libro me ha dejado tan buena sensación y me ha hecho no parar de leer. Normalmente, cuando leo algo, voy poco a poco todos los días, tratando de ser constante en la lectura. Pero pocos libros consiguen que no pare de leer durante todo el día. Ya no se trata de leer un poquito a determinada hora, es a todas horas, haciendo las cosas rápido para poder volver a la lectura. Esa sensación embriagadora es lo primero que diré siempre para recomendar un libro. Igual pasado un tiempo no recuerdo con exactitud muchas cosas de las historias de esos libros, pero sí recuerdo la sensación que tuve en su día al leerlo. Con eso me vale. 

Algo parecido me pasó con La sombra del viento de Carlos Ruiz-Zafón. Aquel libro lo terminé en día y medio. Era tan genial que me enfrasqué en la lectura y no podía parar. Y no recuerdo bien qué era lo que me tenía así, sólo sé que le recomiendo a todo el que puedo su lectura. Y aunque hoy esté hablando del libro de RothFuss, aprovecho también para recomendaros el de Ruiz-Zafón. 

¿Qué tendrá el viento de especial para que nos lleve a través de las páginas y las convierta en un magnífico relato? Os invito a descubrirlo.